encuentra en 1 Reyes 9:1–9. Después de los 21 años del reinado de Salomón, Dios volvió a aparecérsele, al concluir la construcción del templo y el palacio real, entre el 947 y 946 a. de J.C. (v. 11). Esta aparición, en la que Dios le hace promesas condicionadas y advertencias, tuvo lugar sin duda alguna porque Salomón se encontraba viviendo constantemente en pecado. Al principio Dios le hizo recordar que su oración había sido oída y que aceptaba el templo construido y consagrado a su gloria, como
Pages 365–366